martes, 4 de octubre de 2016

Desertor

Por John Jay

John Jay, Estados unidos, Estudiante de Medios audiovisuales, 20 años. 

La viuda amaneció alegre, limpio los barandales de su jardín, engraso la reja y cambio el tapete, esperaba con ansias al medio día.
El chiquillo apareció con la cara limpia, peinado de lado y el traje planchado, se asomo a la reja y lo pensó antes de adentrarse en el jardín, distinguió entre las plantas sembradas el poleo, la hierba buena y el diente de león, la puerta se abrió.
El pacto era ese conversar hasta que fuese la noche, hablaron de las plantas, de la época de siembra y cosecha, de la mala voluntad del gobierno, de la limosna en el templo, hasta quedarse casi sin tema más del acontecimiento aquel.
Se hizo la noche. Ella había hecho una cena romántica con velas, cuando acabaron ella le insinúo que tode debería salir bien.
Lo espero al pie de la cama, con la toalla para asear su entrepierna. Él se había quedado en la sala, pensando, mirando la ventana una y otra vez, luego la puerta.
Ella sintió otra vez el sonido de la reja y se sorprendió luego de tanto aceite volviera a sonar. Era un hecho el chico tenía miedo y se había fugado.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario